Como definir mi experiencia allí: Meteorología durísima con viento, nieve, barro, lluvia... y muchos fallos por mi parte (de todo se aprende).
Antes de empezar:
La bici no me cambiaba al plato grande, pero menos mal que estaba una amiga del club que me dejo las herramientas para ajustarla.
Luego estuvimos pasando frío gratuitamente hasta poder dejar las bicicletas por el retraso de la organización y cuando las dejamos, nos fuimos directamente al ropero a dejar las cosas; pues bien, no pasaron ni 5 min y ya estábamos corriendo, así que calentamiento 0 patatero (una cosa que nunca se debe hacer) pero a la organización le entraron las prisas...
CARRERA
Durante la carrera:
La salida fue muy rápida con un parcial de 3:05 el primer km (la adrenalina me invadió y hay que regular más) y sin calentar pues en el km 4 lo note (el ácido láctico me dio un toque y merecido), y si contamos el barro y la lluvia se me atraganto un poco, pero bueno solo quedaba un km para coger la bici y sabia que iba a mejorar.
Transición y Bicicleta:
Está transición más o menos fue bien, y salí con la bici como un rayo a recuperar lo perdido he intentar pillar el grupo, conseguí adelantar a gente pero el grupo que estaba a 500 metros no les pillaba. Cuando de repente el tercer plato ya no me entraba siempre... me estaba cagando en todo, porque en cada bajada daba pedales y se me escapan, mientras que en las subidas les recortaba, era un desastre no pillar el grupo y estar todo la bici solo.
Transición y Bicicleta:
Cuando ya estaba llegando a la transición pille a dos, pero mi transición fue horrible, tenia tanto frió, que no sentía los dedos y era incapaz de quitarme las zapatillas (una cosa que tenia que haber hecho encima de la bici, otro fallo más) y ponerme las de correr, estaba ya tan angustiado que me senté en el suelo viendo como los otros dos se me escapaban, encima coloque la bici en otro sitio y me lo dijo la juez, tuve que cambiarla... vamos peor imposible.
Bueno imposible no... el último tramo de carrera parecía que corría sin zapatillas sobre hormigón, que dolor de pies, que sensación más horrible, cada zancada era un cosquilleo que me subía por las rodillas. Tenia todo empapado, helado... solo pensaba en llegar a meta.
Y por fin entre,donde me nombraron el noveno (después de todo es una gran posición).
Lamentándome de muchos fallos de novato, que tendré que ir superando, de todo se aprende y con eso me quedo.
Bueno y para acabar la MALDICIÓN DE GALAPAGAR, fue cruzar la meta, y a los 20 seg tiritar como un loco, me duche, me puse ropa seca y seguía tiritando muchísimo. Cogí la bici la metí en el coche, y hasta que no pasaron 10 min con la calefacción a tope, no deje de tiritar. Pero sigo vivo y coleando, próximo fin de semana Duatlón en Rivas.
Clasificación: noveno de 131
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